La ciudad de Dresde responde a la actual sequía con una prohibición de extracción de agua. Desde este martes y hasta finales de octubre, no se podrá extraer agua de las aguas superficiales, según ha anunciado la ciudad.
Según la información, ha habido muy pocas precipitaciones desde principios de abril y muchos arroyos y ríos tienen niveles de agua extremadamente bajos o incluso se han secado en algunos casos. Según las previsiones meteorológicas actuales, esto tampoco podrá compensarse con precipitaciones en las próximas semanas.
A partir de ahora no se podrá extraer agua de las aguas superficiales mediante bombas hasta finales de octubre. Lo mismo se aplica a las extracciones con achicadores. Las infracciones pueden ser sancionadas como infracción administrativa y castigadas con una multa de al menos 50 euros.
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