Ole Werner resumió con satisfacción la exitosa actuación del RB Leipzig contra el FSV Mainz 05. "Sólo puedo felicitar a mi equipo. No fue una buena actuación, pero fue una victoria merecida porque tuvimos las mejores ocasiones y defendimos muy bien", dijo el entrenador del RB sobre la merecida victoria de los sajones por 1-0.
La voluntad de correr, el espíritu de lucha, la compacidad y una gran actuación individual del nuevo fichaje Johan Bakayoko inclinaron la balanza a favor del Leipzig ante 32.000 aficionados, que poco a poco va encontrando su sitio tras la gran convulsión del verano. "Estamos haciendo más cosas como equipo y acumulando una buena energía como grupo. Es la única manera que nos funciona", explicó Werner, que llegó procedente del Werder Bremen.
Las dos victorias por uno a cero contra el Heidenheim y ahora en Maguncia dan ánimos a los responsables para el futuro próximo. "Hemos perdido una calidad individual increíble y hemos confiado en traer jugadores jóvenes, con hambre y capacidad de desarrollo. Y que esta temporada seremos capaces de lograr más unidad de equipo, más intensidad con el balón y contra el balón. Estamos en el buen camino", declaró el director general del RB, Marcel Schäfer.
La química es correcta
En contraste con la temporada anterior, el equipo da la impresión de ser un grupo muy unido estos días. "Se nota que el espíritu de equipo es muy bueno y que estamos creciendo juntos. Tenemos un ambiente positivo sobre el terreno de juego", afirma el veterano guardameta Peter Gulacsi, y añade: "La temporada pasada, rara vez conseguimos ofrecer un rendimiento tan combativo y defensivamente estable. La sensación de logro es importante para que podamos seguir trabajando con tranquilidad."
Los sajones sólo concedieron dos grandes ocasiones en casa ante el Mainz antes del descanso. El poste salvó una y Gulacsi otra. "Si trabajamos disciplinadamente como equipo contra el balón, ganamos partidos. Eso sólo es posible a través del espíritu, de la comunidad, de la unión. Eso es algo que hemos aprendido de este partido y que nos ayudará en nuestro desarrollo posterior", resumió Werner, elogiando: "Todo el mundo se implicó e hizo su trabajo"
David Raum dio un buen ejemplo. El internacional se lanzó en cada entrada y presionó a sus compañeros. "Aquí en Maguncia no te regalan nada. Estas son exactamente las victorias sucias que necesitamos fuera de casa y que nos hacen bien", declaró Raum. Todos los jugadores se han puesto al servicio del equipo y han trabajado duro por él. "Es un gran espíritu el que está surgiendo ahora mismo. Podemos construir sobre eso", dijo Raum.
Se necesita constancia
Werner advirtió, sin embargo, contra la euforia tras la segunda victoria de la temporada, ya que ésta aún es joven. "La base es la intensidad, la comunidad y la disciplina dentro y fuera del campo. Hemos dado un paso adelante en los dos últimos partidos. Pero tenemos que continuar nuestro desarrollo con constancia", advirtió.
La continuidad es necesaria si el Leipzig quiere remontar posiciones en la tabla tras un decepcionante séptimo puesto y quedarse fuera de la competición internacional. Todavía queda trabajo por hacer: "No es bueno, ni siquiera muy bueno", dijo Schäfer. "Pero de momento da una buena impresión"
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