El portero de balonmano Nikola Portner, del campeón de la Liga de Campeones SC Magdeburgo, será suspendido hasta el 10 de diciembre tras su positivo en un control antidopaje en marzo de 2024. Este es el resultado de un acuerdo de resolución de disputas en el que la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), la Agencia Nacional Antidopaje alemana (NADA), la Bundesliga alemana de balonmano y Nikola Portner acordaron una suspensión retroactiva de 21 meses, según un comunicado.
Las partes coinciden, por tanto, en que no hay pruebas de que la infracción de las normas antidopaje se cometiera intencionadamente. Según la información facilitada, el internacional suizo podrá reanudar los entrenamientos en unas ocho semanas.
"Vemos esto como una confirmación de la declaración de Nikola y también de nuestra evaluación de que no hubo dopaje intencionado para mejorar el rendimiento de un jugador del SC Magdeburgo", dijo el director general del SCM, Marc-Henrik Schmedt. "La resolución de la disputa permite a Nikola poner punto final al asunto y reanudar pronto su carrera en el balonmano."
Portner siempre había negado haber tomado el fármaco a sabiendas
La resolución de la disputa sustituye a la decisión de la Bundesliga de balonmano del 16 de julio del año pasado, continúa el comunicado. La NADA también anunció la conclusión de los procedimientos en curso ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo y el Tribunal Regional Superior de Colonia.
Portner había dado positivo por metanfetaminas, también conocidas como cristal, en abril de 2024. Tras semanas de proceso, la HBL se pronunció sin embargo a favor de la absolución, en parte porque "la cantidad de la sustancia prohibida detectada en el cuerpo del deportista era tan pequeña que se puede descartar un uso activo y un efecto de mejora del rendimiento y que no se puede suponer un uso intencionado ni culpable", según la asociación de la liga. La NADA presentó entonces un recurso contra esta decisión ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) de Lausana.
El propio Portner siempre había negado haber consumido la droga a sabiendas. La liga asumió que la contaminación no fue culpa suya. El portero, ahora de 31 años y de talla mundial, había jugado su primer partido oficial desde abril de 2024 tras la absolución de la HBL en la Supercopa hace casi un año y luego jugó toda la temporada en la portería del SCM.
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